lunes, 26 de marzo de 2007

Las Caperucitas

Siguiendo con el tema femenino planteado en la columna anterior, la cual se basaba en las mujeres un poquito “encaminadas” en cuanto a edad y carrete, esta columna nos va a llevar por lo opuesto… las “pollitas” (no en las pollas conocidas en el vocablo ibérico, sino que en las pendejitas (minas chicas po’h!!)). Más de alguna vez hemos pasado por la calle y hemos visto una colegiala, cuyas características físicas nos causan curiosidad o cierta atracción, (en algunos casos, una erección espontánea o algo por el estilo)...

....nadie sabe exactamente el por que de este desarrollo prematuro en las chiquillas de hoy en día; en mis tiempos, las niñas de 14 años, recién comenzaban a formar busto, hoy por hoy, las niñas de 14 años tienen más tetas que años.

La mayoría de las personas culpan de este fenómeno al glorioso Pollo… ¡si!, el mismo que abunda en las mesas populares, las hormonas introducidas en estas aves producen un efecto de “superdesarrollador” en las partes erógenas de estas niñitas, lamentable para algunos, pero un gran descubrimiento para otros.

¿Quien no se ha metido con una pendejita alguna vez?, y no sólo por que los hombres de hoy busquen solo tetas y potos o un hoyito donde abrigar “el niño”… sabemos que la mentalidad masculina está mucho mas avanzada en estos tiempos, ya casi ningún hombre se voltea en la calle para mirar el cuerpo o alguna cualidad de una fémina. Nos hemos convertido en unos seres más profundos, universales, que buscan una compatibilidad espiritual… ¿a quien le importa el físico?.. ¿Quién dijo que el cuerpo lo es todo?... ¿Quien mira las tetas o el poto de una mina para satisfacer algún instinto animal primitivo? Hoy en día todo está en la mente ya nada es físico-corporal todo va en lo sensorial, ¡lo demás es vicio!.

Estas chiquillas… las que siempre se maman frases como: “Tranquila, esta también es mi primera vez”, “Si mi niña, tu eres la primera”, “No le cuentes a nadie, este va a ser un secreto entre tu y yo”, “Dicen que el semen es beneficioso para la piel y la garganta”, “Duele al principio nomás”, “demuéstrame que me quieres!, necesito una prueba de amor…”, “lo que siento por ti es de verdad” o simplemente la mentira más grande del mundo: “La puntita nomás”.

Pero pa’ que estamos con cuestiones, de que las minas chicas tan ricas… tan ricas… de que algunas están absolutamente comestibles, digitables, penetrables y/o psicopateables, estamos todos de acuerdo. De que hay algunas que lo piden a gritos y otras que gritan cuando lo tienen… también, pero eso ya es cosa de cada una de ellas. Hay de todo, chiquillas tiernas (que se identifican con frases como “¡No puedo creer que este contigo!”), amorosas (“te quiero mucho”), bonitas (niñitas con carita angelical), ricas (carita de 15 pero cuerpo de 25), pescaditos (cuerpo escultural, hecho a mano, pero un caracho nauseabundo), wenas pa'l webeo (chistosas, agradables), camboyanitas (buscan cualquier pico mayor pa pasar el rato… onda “Soy tu wawita… dame toda tu leche!!”, “he sido un niña mala… ¡¡¡Castígame!!!), calientes (cuando tienen un weon, son fieles, pero comunacha pa’l que te jedi), tímidas (“ay no!!, me da vergüenza que me veas piluchita!”), tontas (“Cuando grande quiero ser modelo… y me voy a teñir rubia”), y así un sin fin de cualidades que clasifican a estas pequeñas damitas que de pequeñas no tienen nada (otras de damitas tampoco).

Estas pequeñas criaturitas, son aquellas que casi en la mayoría de los casos nos llenan el celular con mensajes, la bandeja de entrada con mails, el cajón, la billetera o lo que sea con cartitas de amor… sipo'!!, hace memoria... esas típicas cartitas en papeles de colores con un lápiz dorado o plateado, con stickers sacados de las agendas (Click, Pascualina, Garfield, etc.), con dibujitos, frases como “Panchito y Panchita se aman hasta la muerte”, bien detallista, artesanal, bonita la cartita…. Y después, te piden que se la respondas, y si se la haces, es en una hoja de cuaderno que con cuea le cortai' los flecos, la doblai' en 400 partes, escrita con un lápiz Bic azul, y tratando de hacer la carta lo menos comprometedora por que sabí' que se la va a mostrar a todas las compañeras de curso… y eso es al principio, cuando llevai' algo mas de tiempo, te webean a cagar pa’ que las vayas a buscar al colegio… y el weas, se pega la paja de esperarla, pero en la esquina… pa que no te cachen muchos, así te ahorrai’ webeo… ellas guardan los boletos de micro que le pagas, los papeles del Bom-Bom-Bum que le comprai’ con el vuelto de los cigarros o del Bigtime, y así cuanta wea le pueda traer recuerdos… o es mentira lo que digo?...pero eso es harina de otro costal… no digo que esté mal, en lo absoluto, pero es característico de la mayoría de estas señoritas.

Al fin y al cabo… todas van pa 'onde mismo… de que son ricas, son ricas… y como dijo el Miguel: “Hey profanador, tal vez tengas la razón, la edad no importa en el amor, soy otro profanador!!

Nota: Esta columna no tiene ninguna relación con los integrantes del Autor ni otro perfil Pedofílico o alguna conducta típica de un hombre modal… todas las Chiquillas mencionadas tienen mas de 30 kilos, leen de corrido, no arrastran la bolsa del pan y tienen todos los dientes de hueso…

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